La planta está formada por un cilindro de material plástico dividido en varias compartimentos, cada uno responsable de llevar a cabo una fase en la depuración del agua. Además, la planta cuenta con un aireador que le proporciona el aire necesario para que el fango bacteriano pueda hacer la labor de reciclaje. Este aireador es controlado por un microcontrolador. Este microcontrolador proporciona a la planta la cantidad necesaria de aire en cada momento; para ello, el micro tiene programado una serie de tiempos en los que tiene que aportar aire, tomados de estudios estadísticos teniendo en cuenta nuestro clima mediterráneo.
Para poner en marcha la planta es necesario fango de alguna depuradora que ya esté en funcionamiento; por ejemplo, de la depuradora municipal de nuestra zona. Si no se dispone de fango, la planta desprende mal olor hasta que se forma el fango inicial. Después de algún tiempo funcionando, el fango de la planta va reproduciéndose y adaptándose a nuestro microclima.
Uno indicador que nos permite saber el buen funcionamiento de nuestra planta es la existencia de larvas de mosquitos en la superficie del fango. Esto indica que la calidad del agua depurada permite vivir a los mosquitos.
Como ventajas a destacar de la planta Bioclar caben mencionar:
- Alta calidad en el agua depurada.
- No genera mal olor.
- Fácil de instalar y mantener.
- No genera apenas ruido.
Si alguien está interesado en este tipo de plantas puede ponerse en contacto con Pin Pan-ASP, distribuidor en España.