La imagen muestra el proceso de diseño al aplicar permacultura en la finca. El proceso se caracteriza por tener un ciclo de vida evolutivo o en espiral. Este ciclo de vida es útil para resolver aquellos problemas en los que se dan las siguientes circunstancias:
- Los requisitos cambian: Los requisitos no están fijados completamente al comenzar la implantación o cambian a lo largo de la implantación del diseño. Esto es así bien porque el cliente (en este caso, nosotros mismos) no sabe muy bien lo que quiere o porque, a partir del feedback proporcionado por la implantación, los requisitos cambian. En la variabilidad de los requisitos también influyen factores como nuestra evolución como individuos adquiriendo una consciencia para con el entorno mas sustentable.
- Sistemas dinámicos: En estos sistemas el comportamiento de la implantación del diseño puede variar, por lo que habrá que tomar acciones correctivas para recuperar el comportamiento original. Es posible también que el comportamiento de la implantación haya cambiado tanto con respecto al original, que sea menos costoso modificar los requisitos del diseño, por lo que estaríamos en el punto anterior.
Los objetivos que persiguen las fases del diseño es:
- Estudiar y observar el sitio donde se pretende implantar el diseño. Para esta tarea se pueden emplear métodos como SWOT. Es importante determinar qué oportunidades, debilidades, fortalezas y restricciones tiene el sitio. Por ejemplo, una restricción pudiera ser la escasez de agua; y una oportunidad pudiera ser la gran superficie del sitio que, utilizándola adecuadamente para recoger agua de lluvia podría contrarestar la restricción anterior.
- Estudiar los requisitos que debe cumplir el diseño final teniendo siempre en cuenta los principios de diseño que aporta la permacultura como:
- Principio de localidad
- Principio de mínimo esfuerzo - máximo beneficio.
- Redundancia en posibles puntos de fallo.
- etc...